viernes, 12 de julio de 2013

EL BOOM DE LAS BICICLETAS



En los últimos años, la búsqueda de una vida sana, el caos del tránsito en las grandes ciudades y las ganas de disfrutar el aire libre, llevaron a gran parte de la población a elegir la bicicleta como un medio de transporte ecológico, económico, saludable y rápido.




La bici salió de su escondite donde se encontraba guardada durante años (en los garages de las casas, por ejemplo) para imponerse en la actualidad como una solución ecológica ante la contaminación. Pero con el plus que permite también hacer ejercicio mientras se maneja, disminuyendo el sedentarismo que sufren hoy muchas personas que eligen el tren, subte o auto para dirigirse a sus trabajos u otros destinos.

Cuanto más se utilice la bicicleta para los desplazamientos diarios, mayores podrán ser los beneficios para la economía, la calidad de vida y la salud de la población. Es por estos motivos que actualmente las ciudades buscan impulsar su uso, como sucede en Buenos Aires, que posee más de 100 kilómetros de bicisendas y un programa para utilizar bicicletas gratuitas que ya tiene más de 60 mil usuarios. Y más aún, los adeptos siguen creciendo tanto que se busca que cada vez sea más barata y ecológica, como la bici de cartón que construyó un emprendedor israelí, con un bajo costo de producción, resistente al agua y que soporta hasta 140 kilos de peso.

Cada vez más personas hacen del uso de la bici un estilo de vida saludable. El ciclismo es uno de los deportes más completos ya que permite que todo el cuerpo esté en movimiento. Sin embargo, no es excluyente  tener que ser profesional para poder gozar de esos beneficios. Muchos la utilizan en las plazas, parques, en un día de sol o para trasladarse de un lugar a otro.

Numerosos estudios médicos corroboran que utilizar la bicicleta de forma habitual mejora la salud general, ayuda a la prevención de problemas físicos y reduce el riesgo de enfermedades. Además, su uso permite mejorar la capacidad pulmonar, aumentar el flujo sanguíneo, reducir el colesterol, perder peso y hasta tonificar los músculos.


Lo más importante de todo es que mejora el ánimo, permite disfrutar de la naturaleza y divertirse haciendo deporte. Ahora, ya no hay excusas para dejar el auto guardado y salir a andar en bicicleta.

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